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Quiero hacer un pequeño homenaje a mi madre, que falleció hoy hace un año. El 9 de febrero de 2018, a las 13:42h. nos dejó, sí, pero como bien dijeron en el funeral, lo que nos ha dejado es sólo su físico, sus recuerdos perduran y esos siempre estarán presentes en mí; “recuerda" mamá, allí donde estés, tu hijo José María, tu novio (entre "olvido" y coña) como me decías últimamente, no te olvidará jamás .
Lo voy a hacer a mi manera, ya sabéis que yo no soy escritor, ni de grandes frases ni alardes, ni nada parecido, sólo como digo, porque me apetece tenerla en cuenta para siempre y dejarlo escrito .
Nació un 27 de agosto de 1927, es la segunda mujer en la familia de los "Ruises" de La Aparecida (Ramón y Manuela o Jerónima, le decían de las dos maneras, D.E.P.mis abuelos maternos); sus hermanos/as, Agueda (+), Pepe (mi padrino +), Timoteo (+) le preceden y ella pasa a ser la 4ª. Después vinieron Ramón (+), Carmen, Antonio (+), Jesús y Purina. Ésta última, su queridísima hermana pequeña, en la actualidad pasándolo mal con esa otra enfermedad de "moda", el alzehimer; desde aquí le mando mucho ánimo y fuerza para poder llevarlo lo mejor posible, a su marido Carmelo e hijos, Cristina y Pepito.
De infancia delicada por las penurias de aquella época, pero ella en cuanto empieza a empinarse (y a veces antes) le toca ayudar en la huerta, realmente como todos. En Orihuela aprende a leer y escribir y realmente no necesita más porque tiene otras muchas características que la hacen ser una "echá palante", como por aquí decimos.
Novios o pretendientes como ella decía, tuvo por supuesto, era guapa la "jodía"y para muestra todas las fotos de este post .
De la mano de su hermano Pepe "emigra" a Reus (Tarragona), él allí se encontraba y ella va en busca de trabajo. Cataluña era de las regiones donde se podían presentar oportunidades en ese aspecto. Aparece la primera y no la desaprovecha, el Instituto Pere Mata de esa población, necesitaba cocineras, cuidadoras, etc. para sus residentes, muchos de ellos desvalidos, con problemas psicológicos, etc. etc. Se integra en la cocina y como allí todas las manos eran pocas y a ella se le daba muy bien, también echa una mano cuidando enfermos. Por lo que se, decían y los pocos recuerdos que tengo de pequeño, era lo más; increíblemente profesional en ese aspecto y todos la querían por su trato y bondad, a nadie que la conoció le extraña lo que digo.
Las colonias de casas existían y por la zona se agrupaban murcianos, alicanticos, valencianos y demás regiones, y es ahí donde conoce a mi padre, Antonio Torralba "el pintor" (+), se le daba bien la brocha gorda, no es la de cuadros, no. Él también tiene suerte y empieza a trabajar en Tarragona, Salou, Cambrils y demás zonas "limítrofes" con Reus y es un manitas con la pintura en paredes y techos, y con el gotelé posteriormente; no se si a Benito el de la tele (serie: Manos a la Obra) le enseñaría, él o viceversa, jeje. La verdad es que no les faltaba trabajo y eso les hace empezar a salir muy a menudo y conocerse, llegando a casarse un 23 de junio de 1960, justo un día después de cumplir él (mi padre) 26 años; fue allí mismo en la parroquia de S.Juan Bautista/Reus, y llevados de la mano de mis padrinos Pepe (+) y María (+), éstos que ya se habían casado un poco antes que ellos; (D.E.P. ambos, otras dos buenísimas personas).
Hacen su vida y alquilan una casa en el mismo barrio que mis tíos (Bellavista), cercano al trabajo de mi madre, y pasado un mes aprox. se queda embarazada del que suscribe y como es lo suyo 9 meses (20 abril 1961) después nací yo, su único hijo; ella quería tener otro después pero no pudo ser o no se lo plantearon seriamente, nunca supe realmente lo que fue. Con un pequeño en casa, ella deja de trabajar pero fue menos de un año, enseguida se enganchó a media jornada de nuevo en el Instituto Pere Mata, le tenían devoción, como dije, era muy querida en su trabajo con los enfermos.
Me cuida una vecina, la Sra.Carmen, mujer de Guardiola, con 3 hijos, Manola, Joaquín y José Fco., me relacionaba con éste último que era de mi edad o un poco mayor. Mi madre no quería dejarme pero lo económico achuchaba en esa época, había que comer y los salarios no eran para tirar cohetes, era necesario trabajar los dos. Se quedó tranquila, agradecida (siempre lo ha sido) y transmitía todo su cariño a espuertas a los vecinos por cuidar de su hijo.
A ese barrio fue donde volvímos, de vacaciones como muestra la foto; de visita a sus/mis orígenesssss.
Con Antonio (le decían el primo, porque era hijo de su tía de Francia) y su mujer Pepita, se prodigaban en sus salidas, y ella a mi me trataba muy bien y le hacía muchos favores a mi madre quedándose conmigo, etc. etc. D.E.P. los dos también.
Se pasaron penurias, sí, enfermedades que entonces la medicina no era la de ahora, y no sabías si las pasarías o no, tanto ellos como yo, pero se pasaron. También tienen el apoyo de mi abuela Ana María (D.E.P.; mi abuela paterna, la madre de mi padre), un encanto de mujer, como la recuerdo también, y cuando yo cumplí 5 años deciden que me venga con ella a Murcia a casa de mis tíos (Teresa+ y Miguel) y cuidarme, hacerse cargo de mi, mientras ellos encontraban salida y trabajo aquí en Murcia.
Pasaron 2 años y justo el día antes de mi comunión (7 años tenía yo), una imagen se me quedó grabada y a mi madre seguro que más, salí a comprar algo que me había mandado mí tía y en la misma puerta me tropiezo con mis padres, de sopetón; mi madre preguntaba, ¡ José María, José María !, ¿¿ es que no me conoces, eres tú ?? con los ojos llenos de lágrimas de no haber visto a su hijo en casi 2 años (sí hablábamos por teléfono de vez en cuando). Aquel momento hizo que mi madre se replanteara lo más rápido posible venirse, pero como fuera, no iba a permitir que su hijo se olvidara de ella, así que, a los pocos meses regresan y buscan piso desesperadamente, siendo Patiño la localidad, donde encontraron un 3er piso sin ascensor, pero era lo asequible para sus pocos ahorros y mientras encontraban un trabajo.
Sin trabajo, pero buscando aquí en Murcia, vivimos los 3 juntos, y es mi madre la primera que encuentra nuevamente, esta vez fue de sirvienta en casa de D.Emilio y Dª Elisa, como ella les llamaba muy educadamente; sirve en cocina y en toda la casa. Trabajo "cómodo" decía, porque el autobús de Patiño la dejaba en el jardín de Floridablanca donde ellos vivían, fue duro para ella, tenía que separarse de nuevo de su hijo durante el día, y era cuando me iba a casa de mis tíos de nuevo, colegio allí con mis primos, etc. etc., pero ya por la tarde-noche volvíamos a estar juntos.
Mi padre también encuentra trabajos esporádicos, y encima también fuera, un día en Torrevieja, otro en Alicante, otro en Cartagena, etc. etc. vamos que tampoco estaba en casa.
Aún recuerdo aquella bandejica (de merengues gloria) que me traía mi madre, todas las tardes a casa cuando salía de trabajar, y que compraba en la Confitería La Espiga Dorada de la calle Floridablanca, antes de coger el bus; así he salido yo de goloso, y ella, que también lo era y su diabetes, la misma que estuvo "presente" hasta su muerte.
Una de esas tardes, fue cuando le di (yo con 10 años) el susto de su vida, justo cuando bajaba del autobús se encuentra revuelo donde la esperaba, en la carnicería de Antonio y Pilar, me había atropellado un coche; fractura abierta de tibia y peroné y fue en el Hospital Gral. (ahora Reina Sofía) donde me arreglaron el tema, sin tener que injertar piel de ningún sitio, ni nada, ahí está el pedazo cicatriz, el sufrimiento de ella en su cara se le notaba; es otra imagen grabada que tengo de ese instante, lo pasó muy mal. Tengo muchos recuerdos y doy las gracias por el apoyo, a la vecina de enfrente, la de toda la vida, Conchita, a su lado siempre su hija María del Mar, y a su marido Mariano.
Mi padre (me apetece hacer esta salvedad del que fue su pareja, y mi padre, hasta el 2010 que falleció, D.E.P.donde estés también) hace una entrevista y examen para la Diputación, y lo cogen, pasando a formar parte de la plantilla del equipo de pintores (luego crearían departamento mantenimiento) y que por entonces adecentaban (pintaban las habitaciones, etc.) continuamente de los hospitales de Murcia dependientes de ese organismo. Recuerdo su primer trabajo en el Hospital General (como dije, ahora Reina Sofía) donde permaneció mucho tiempo, también el H.Psiquiátrico/El Palmar, menos tiempo y también de vez en cuando en el Complejo Residencial/Espinardo. Por último y ya como Comunidad Autónoma se integró en el servicio de mantenimiento primero de la Consejería de Hacienda en Teniente Flomesta y finalmente en el Palacio de S.Esteban donde se jubiló. Mi madre encantada, porque fue ella la que pidió a su "señorito" D. Emilio, si podía buscarle algo de trabajo y le consiguió la entrevista; era tan buena que si encima estaba en su mano, no se le podía decir que no.
Como dije antes, ha habido momento de vuelta a mis orígenes y para muestra esta otra foto de la derecha, donde mi madre con mi prima y conmigo está; acabábamos de terminar de hacer una carrera por el famoso Barrio Bellavista y alrededores; yo me quedé 3º, aún no me lo creo con aquellas cuestas hacia el Instituto Pere Mata y lo dura que fue, pero es que mi prima se quedó entre las 8/10 primeras; no se quien se apuntó a esa carrera para quedar tan bién, jajaja...
Fue ella (mi madre) una mujer agradecida y cuando hay cambio de residencia de los "señoritos" (les llamaba también así) a la calle Isidoro de la Cierva, se lo proponen y a pesar del gran cambio que suponía, en transporte, casa más grande, etc.,ella se va con ellos; a su Dª Elisa no la iba a dejar nunca. Tampoco en su casa de campo en Balsicas donde ahí si, yo la acompañaba todos los veranos (de Julio a Septbre); esas vivencias ya son más mías que de ella, porque su trabajo no cambiaba, sólo cambiaba la casa. Mi padre no venía, claro, él se quedaba en Murcia y/o trabajando por la costa. Recuerdo mis ratos con el casero, recogiendo almendra y pelándola después, los girasoles y comiéndonos las pipas después, etc. etc. Esos ratos en la piscinica de la casa con los nietos/as del señorito D.Emilio, sobre todo con Josemi, Juan Antonio, Miguel Angel, aún queda ahí esa amistad con ellos; también con Eli, M.Mar y José otros nietos de Madrid.
Pasan los años y tras el deterioro físico y mental de Dª Elisa, se decide prescindir de mi madre y ella con mucha pena (lo pasó fatal), ya decide permanecer en casa. También el deterioro de mi madre se nota y le aparece la glucosa alterada, tanto sacrificio tenía que salir por algún sitio. Con 60 y pico de años y ya con insulina, pero lo lleva bien.
Mis colegios en Vistabella, Ruiz Mendoza (6º y 7º EGB, donde fui campeón reg.de balonmano) y Colonia S. Esteban ya en 8º EGB en este último (donde encontré mi segundo deporte, después del fútbol, el baloncesto), la llevan a ser una ama de casa ejemplar, entre otras muchas faenas, con su comida preparada siempre para cuando llegara su hijo y su marido; sus magdalenas, bizcochos que hacía espectaculares, sus cordiales y tortas de naranja (en Navidad) que bajaba al Horno del Mejías para su terminación, justo enfrente de casa.
1º BUP, Academia Climent y Politécnico posteriormente, son mis estudios y que ella vive más apegada a mi, aunque si es verdad que yo seguía yendo y quedándome a comer en casa de mi tía Teresa y Miguel en Vistabella; mis primos Michel, Mariate, Mariano y Marga tiraban mucho, a pesar de que luego no nos veíamos tanto, cuanto los quiero; mi madre ahí estaba siempre. Ahora entenderéis porque digo muchas veces que mi tía Teresa fue mi segunda madre, si es que me he criado con ella y ellosssss.
De la preocupación por mis "amigas", algunas llegaron a ser "novias", ni os cuento, a ella si le preocupaba siendo tan joven y con esa relación, pero como es ley de vida, siempre aceptaba con quién iba si a mi me gustaba; con mi padre ya era otra cosa.
Mi primer trabajo me lo buscó mi padre, si no vas bien en los estudios, aprende lo que es trabajar decía, y fue en el Estudio Arquitectura F.Box/ calle Sta.Teresa donde empecé, de la mano de mi vecino Jesús que también trabaja allí de delineante; mi madre lo llevó mal, sufría porque era muy joven trabajando a esos 14/15 años. Luego encima me busqué otro trabajo llevando contabilidad en Bisutería Fages/calle Verónicas y hasta compaginé con posterioridad con los estudios nocturnos FP (de 19:00h a 23:00h) y eso lo llevaba peor mi madre, porque llegaba muy tarde a veces, sobre todo si me tenía que volver andando desde Av.Miguel de Cervantes hasta Patiño; las andanzas de esas noches para mi quedan, perros que se me tiraban, algún problemilla con otros jovenzuelos, etc. de los que uno se encontraba a esas horas y por enmedio de la huerta por donde atravesaba; mi madre a penas se enteró ni de la mitad.
Recién cumplidos los 18 me saco el carnet de conducir a la primera, y con el coche de mi padre, un seat 127 lila (digo el color porque habían 2 en Murcia), la llevaba de vez en cuando a su pueblo (La Aparecida), con mi padre al lado, claro; que orgullosa se sentía al verse llegar con su familia y su hijo conduciendo.
Me compro un 2CV azul azulete en contra de mi padre y vuelve el sufrimiento a mi madre porque las salidas nocturnas la seguían hacerse preocupar más aún hasta que no llegaba a casa; yo lo hice sobre todo, por poder volver por las noches tras salir del curso de FP nocturno pero luego lógicamente también lo utilizaba para el resto de salidas; juventud divino tesoroooo.
En Mayo del 1981, mi lesión de rodilla (triada: ligamento cruzado, ligamento lateral interno y menisco interno) jugando al fútbol sala, fue un trauma para ella y en general para todos; decirle los médicos que me iba a quedar cojo no es lo más satisfactorio para una madre ni padre. A pesar de las complicaciones, rehabilitación, etc. pude recuperarme (no del todo, secuelas deja) y andar; aquí estamosssss.
Pero como dicen por ahí que "no hay mal que por bien no venga", me libré de la mili en Agosto de ese mismo año, aunque sólo me dan 6 meses de exención temporal en Hospital Militar de Valencia, siendo en Cartagena con posterioridad, cuando me dieron la exención total. Para ella un sufrimiento menos, porque nada más que de pensar que me iba a Tenerife en primera instancia, no lo llevaba nada bien, además, hizo que pudiera coger el puesto de contratado (ver siguiente aptdo.) y el posterior puesto definitivo de funcionario.
Cuando aprobé (novbre mismo año) una oposición a contratado en la Diputación en 1981, si se puso contenta y muy orgullosa de nuevo de su hijo, me dijo; las lágrimas me caen de nuevo al recordarlo. Renovación de contrato en 1982 y en Agosto de ese año, ya pasamos a ser Comunidad Autónoma. Las primeras oposiciones a funcionario fijo fueron en el 1986 y eso ya fue para ella una tranquilidad absoluta de ver a su hijo colocado con puesto definitivo, decía.
Compagino trabajo CARM con el de contabilidad por la tarde, pero al 2º año ya dejé éste último y mi madre me dijo que había hecho bien, que descansara un poco, ella no me veía casi naaaaa. Me compro mi primer coche nuevo, un Renault Super5 y ya me veía menos porque empiezan mis viajes con amigos y por España; no había puente, ni fiesta que no me fuera; ya sabéis de donde me viene el tema.
Conozco a mi mujer, Paqui, con la que comparto grupo de amigos (sobre todo con Paco Pi y Dori también) y en el mes de Septbre.(día 24) del 1985 empezamos a salir, donde mi madre ya se enteró, vamos que sí, desde el comienzo lo sabía, no se que me notó la "jodía" jeje; no obstante, yo se lo dije unos días después de aquella 1a.quedada para ir al cine y a tomar algo en el Pub El Congreso/BºCarmen; de película también éste, jeje.
Su alegría (de mi madre) fue máxima cuando conoció de quién era hija la "chiquita", porque la coincidencia hizo que sus padres fueran también del pueblo, de su pueblo, La Aparecida, siiiii; el Rafaelín decía, el hijo de la "Fransisca" (abuela de Paqui).
Que más contaros de esa relación, nos casamos en junio de 1989 y nuestros padrinos fueron ellos, Rafaelín (D.E.P. también, suegro) y Fina (mi madre); que guapa estaba (FOTO), que ilusionada, que sonrisa de oreja a oreja de ver a su hijo casado con una buena persona, con trabajo, etc.
Se cambian de casa de Patiño a La Flota, ya no estaba ni ella ni mi padre para subir las escaleras de esos 3 pisos. Sufrimiento con mi padre, por ver algunas cosas que no aceptó (no vienen a cuento) y se dejó llevar sin cambiar nada de un piso nuevo a estrenar, donde podía haber hecho al menos un armario en la entrada o mejorar calidades de él; no se dejó, ni se dejaba generalmente asesorar por nadie, algunos/as que lo conocisteis sabéis de que hablo; se dice cabezónnnnnn.
Sólo le faltaba la nieta o el nieto, que tardó en llegar nada más y nada menos que 10 años, si es que vivíamos tan bien con nuestros viajes y salidas que ni nos lo planteábamos. En enero de 1999 a las 23:03 nace su nieta Elena, la única que tuvo, pero la quería como nadie, lo único es que la pobre cuando vino tampoco pudo disfrutar de ella mucho en su casa y saliendo con ella, por sus achaques de espalda, rodilla, etc.
Si lo hizo (disfrutar) en todas las comidas y quedadas que hacíamos en familia, y en todas las fiestas donde nos juntábamos con mis suegros; éstas eran en Bando de la Huerta, Entierro de la Sardina (éstos pasaban por la puerta de casa de ellos), Semana Santa, Navidades, cumpleaños (todos), etc. etc.; éramos de celebrarlo todo, bueno seguimos siéndoloooo, jeje.
Nuestras salidas en coche, siempre le daban respeto y me hacía que la llamara siempre al llegar al destino; estando Elena más, porque con ella no dejamos de viajar, noooooo.
El tiempo pasa muy rápido, y mi padre que se lleva muy bien con mi suegro, tanto que suelen salir en parejas los 4 (mis padres y mis suegros), buen rollo, para ella eso es una liberación sobre todo para olvidarse de sus dolencias.
Toca darle la mano y hacer como hacía ella conmigo en aquella carretera de Francolí (foto), esa misma mano que tuve agarrada el momento de su fallecimiento, imagen que no se me olvidará nunca.
Al final y siguiendo con ese deterioro, no queda más remedio que aceptar por parte de mi padre que, mi madre necesitaría esa persona y lo asume; muy bien por cierto, con esas dos chicas que digo.
Pero ahí no queda la cosa, sus dolores en la espalda y rodillas coartan a mi madre en movimientos y alguna que otra caída nocturna hace que la pobre lo pase mal, acuda a Unidad Dolor, etc. etc.
Mi padre en 2009 se pone mal, le detectan un cáncer de estómago y él dice que no le duele nada, que lo dejen, pero al final asiente y lo operan en el Hospital Reina Sofía, dejándolo limpio y sin rastro alguno, decidiendo no darle quimio ni radio, pero si haciéndole controles periódicos en el H.Morales Meseguer, donde yo le acompañaba.
Tiene que seguir una dieta estricta y mi madre dispuesta a hacer lo que necesite, pero no se deja, ni con ella ni con los médicos; sufrimiento total de mi madre en casa, sí.
En 2010 su cuerpo ya no aguanta y fallece; a mi madre no le digo nada hasta el día siguiente, porque el fallecimiento se produjo pasadas las 12 de la noche del día 19 de marzo, pero ya en el día 20. Día del padre me decía el médico cuando ya auguraba el desenlace, vete y "celebra" tu santo y ese día con tu mujer e hija, estando comiendo me llamaron y ya me dijeron que me fuera haciendo a la idea; como dije, mi madre no le comenté nada, sólo que seguía ingresado. Menudo día del padre, son de esos que no se olvidan, no, y esa fecha grabada la tengo para siempre.
Tras el entierro, no duerme sola (mi madre) y la acompañarían unos días, aunque luego y tras varias llamadas al avisador Cruz Roja de caídas, etc. etc. tuve que meter una mujer por la noche para que durmiera con ella. Gracias Angelita a ti también.
Le pedí la Dependencia y se la dieron con 2º nivel pero ahí la tenía, concediéndole poder acudir al Centro de Dia, sito en la Resid.S.Basilio. La recogían en la puerta de casa en un microbús, comía allí y la traían por la tarde a las 17h.
Me decía "por qué no he ido yo antes a este sitio, me lo paso genial, tengo amigas que están como yo, hacemos manualidades, hacemos gimnasia y comemos todas juntas con las que están en la residencia"; estaba encantada.
A la izquierda en la foto de arriba del día de carnaval en el Centro de Día; junto a ella está la madre de mi amigo Jesús, donde coincidieron y se llevaban muy bien. D.E.P. también, Carmen.
Llega un escalón más y como se ve en la foto, iene que coger andador, pero se iba igualmente a su Centro de Día todas las mañanas; Geovanna se encargó tanto del bus de la mañana como de recogerla por la tarde; encantado y agradecido estaba yo, claro.
Un día hablando con ella, me dice que hay algunas compañeras del Centro de Día que se quedan a dormir también, le pregunto si es que a ella le gusta eso, y me dice que no le importa, que las conoce a todas y que me firma los papeles sin problema; tomaaaaa, no me lo esperaba.
Empieza a no poder levantarse por las mañanas y a pasar el mayor tiempo del día durmiendo, su cuerpo por el dolor, el aburrimiento, la diabetes, etc. etc. la veo que no aguantaría mucho así.
En un par de años o un poco menos, la llaman y le dan plaza en la residencia S.Basilio, la misma donde iba al C.de Dia; recuerdo que fue el 13 de mayo de 2014. No se si fue eso, su mejoría, sus ganas o qué fue, que el andador "volaba". Ese mismo día del ingreso y esperando habitación, una interna se cae desmayada delante de nosotros, y no tardan ni 1 minuto en atenderla y en 2 minutos en subir la doctora del centro, le digo a mi madre : "mamá, has visto, por esto mismo es por lo que tú y yo deberíamos estar tranquilos".
Daba gusto verla, estaba encantada con su grupo de amigas, las mismas con las que había coincidido en el Centro de Día y que estaban allí; ella ha vivido la muerte de casi todas, y un día no aparecían y en su cara se reflejaba la tristeza, aunque iba echándose nuevas y con su "motico" (andador) iba hacia el comedor dándole a todas las sillas de rueda que iban más lentas, mamáaaaa !!! (nos reíamos al recordarlo y ella con nosotros).
Recuerdo aquella pregunta sobre mi gorra, esa que llevaba, cuando los efectos de la quimio hizo esa aparición física en mí; le dije que era la moda y me gustaba llevarla, se echó a reir, sopló sus velas de sus 88º cumpleaños y disfrutó de ese ratico con su consuegra, su nuera, su nieta y conmigo; me quedo con esa cara de contenta y su nuevo "look", primero pelo sin tintar y con mechas y luego más cortico, también me quedo con la gentileza de sus cuidadoras en la residencia, con la peluquera que la sufría y oía cuando tenía que esperar mucho, es que genio también tenía, claro.
Infecciones de orina, caídas, etc. la llevaron a ingresar en el H.Morales en más de una ocasión, al menos 1 por año, y esos ingresos se le notaban, como dije antes, un escalón más abajo cada vez, tanto que en una de esas caídas, ya pasó a la silla de ruedas directamente. También con oxígeno puesto por deficiencia respiratoria; su bronquitis crónica hacía estragos, pero se recuperaba de ello, tanto que ya últimamente ya le ponían el oxígeno muy poco tiempo.
Fue el 8 de febrero de 2018 aquel ingreso por Neumonía, yo creía que era por resfriado y no tiene por qué estarlo, de hecho no estaba; primero pasó por el H.Morales Meseguer y después por el H.Mesa del Castillo; un día duró la pobre, luchando contra natura con sus 90 años, como dije, agarrada de mi mano (y la de mi Paqui) se nos fue la mujer más buena del mundo, ese 9 de febrero de 2018.
Se me ha quedado un hueco en mi vida diaria, esas 4/5 tardes que la visitaba ya no han sido cubiertas con nada este año que ha pasado.
Mamá eras y serás grande,
Mamá eras y serás agradecida,
Mamá eras y serás gentil,
Mamá eras y serás buena,
Mamá eras y serás la mejor,
Mamá eras y serás mi madre;
Mamá te recuerdo y te recordaré;
TE QUIERO y TE QUERRÉ SIEMPRE !!!
Toca seguir volando, como esas palomas y
junto a tu marido !!!
De parte de
tu hijo José María que NUNCA te olvidará .
9 de febrero de 2019
T E Q U I E R O !!!
PD.:
La foto que encabeza este post, perdurará con sus cenizas, en la lápida y junto a su hermano Timote (Timoteo) como le gustaba llamarle, en el Cementerio de La Aparecida, su pueblo querido, pero sobre todo su familia querida la de allí.
